martes, 21 de noviembre de 2017

Ayudando en el cole

En el cole de la duendecilla necesitaban una forma visual y divertida de mostrar qué niños ayudaban ese día en el comedor (ponen las servilletas, llenan las jarras...) Nos preguntaron si podíamos ayudarles. ¡Dicho y hecho!


¿Qué tal unos muñecos cocineros que cada día cambiaran de delantal?

En los delantales ponemos el nombre de cada niño con cinta planchable, y además, cada uno es de un color distinto, para que puedan reconocerse hasta los que aún no saben leer.


La cabeza de los muñecos es una cuenta de madera, para que resistan bien el cambio de ropa ;)

No tienen género muy marcado, pueden ser tanto cocineras como cocineros.


Y al hilo de esto, una idea "transversal". En nuestro primer boceto, las letras decían "Ayudantes de Comedor". Usamos tanto el masculino genérico, que muchas veces no se nos ocurren formas de hacer inclusivo el lenguaje que no suenan para nada forzadas: "Hoy ayudan en el comedor"... No cuesta mucho y ayuda, claro que si. Hablando y escribiendo creamos realidades.

miércoles, 8 de marzo de 2017

En el bosque

¡Hola amigos de Desván!
¿Queda alguien por aquí? Casi un año sin abriros nuestra puertecita. Aunque tampoco teníamos mucho que enseñar...hemos estado muy ocupados en otras cosas: Os presentamos al nuevo duendecillo de nuestro hogar: Val


Seguimos viviendo muy cerca de las montañas, y con la naturaleza inspirándonos hemos vuelto a la carga con un móvil para un bebe que se va a llamar Mario, A su mamá le encantan los erizos, y queríamos que ese animal fuera el protagonista del móvil.



Así que en lugar de poner otros animales, lo rodeamos de setas, hojas, frutos y bellotas...





...decorando los hilos también con margaritas, que nos ayudaran a llevar un trocito del bosque a su cuna.


En lugar de montarlo sobre un aro forrado, como otros de nuestros trabajos, quisimos darle mayor ligereza visual y optamos por hacerlo con varillas cruzadas. El inconveniente de este tipo de montaje es que las piezas del móvil necesitan estar mucho más equilibradas para que se mantenga horizontal. En este caso lo solucionamos contrapesando la hoja de roble con monedas en una funda, también de fieltro, que simulaba otra hoja de roble.


A veces, trucos como éste pueden ayudarnos mucho más que soluciones más complejas.



Esperamos que os haya gustado. Pronto os contaremos en qué más hemos estado trabajando.
¡Nos vemos en el Desván!